EL GALLO, ÍNGRIMO VIAJERO DEL TIEMPO

Ann Carole Fletcher, pintora francesa - Gallo cantando
¿Podrá el horario humano
cambiar el exacto cantar del gallo?
Quizá amanezca más temprano,
pero este guardián de la noche
no esquiva la llamada
para que el sol despierte.
Lo escucho en esta larga madrugada
y sé que el mundo
sigue en su sitio
porque
alguien canta todavía.

John James Audubon, pintor estadounidense de origen
francés (1785 - 1851) - Gallos
Ese gallo lorquiano
que cava buscando la aurora,
aquel del Coronel de García Márquez,
el de Jesús que anunciaría con su canto la negación,
el gallo prometido de Sócrates a Esculapio,
el de Kunta Kinte en “Raíces”,
los de Gabriel Bracho,
nuestro universal muralista,
los pertinaces de la revolución mexicana,
los que aún cantan en la poesía de Eugenio Montejo,
el del partido comunista que celebré en mi juventud,
los de Orlando Araujo en “Compañero de viaje”,
los de Vargas, nuestro escultor y tallador popular,
los de mi tío Rafael que perdió cada domingo
en la gallera de mi pueblo,
los de Camilo, el poeta…
en fin, los gallos de nuestra tierra latinoamericana,
los gallos del mundo
que escuché hace 67 años
a pocas horas de mi nacimiento
y abrieron surcos en mi cuerpo
para que la sangre fuera un río insistente en mis
venas…
volvieron esta madrugada, atravesando mis días,
con la exacta y poderosa garganta
de ese íngrimo viajero del tiempo.
José Francisco Ortiz Morillo
Santa Cruz de Mara, 21/10/2011
No hay comentarios:
Publicar un comentario